Fact

Y se cree muy importante maquillando su soledad con sus ocupaciones, cree que esta por encima del bien y del mal, que todo esta bien, que las cosas que le suceden y le preocupan al mundo no son su problema, que usted no es la gente, es una galaxia alterna que flota en una burbuja en este universo por equivocación del sino.

Piensa que sus anhelos y deseos no son los típicos de los terrícolas, que encontrar el amor es un absurdo, que casarse y ser felices comiendo perdices es solo un cuento de hadas, que la realidad es una escala de grises. Que para ser feliz no se nesecita de nadie más, solo su independencia, su libertad angustiada. Se excusa diciendo que no ha llegado la persona indicada que sus estándares son lo suficientemente altos como para que un ser terrenal aspire a ser su compañia.

Sin embargo está esperando un milagro, mientras pasa las noches ocupando la mitad de su cama fría, recogiendo migas del pasado que aún la confunde, la aturde y la desvela, removiendo entre la arena la verdad, buscando en el agua claridad, silencio, aire.

Se mira al espejo como si éste tuviera su respuesta, pero tan solo es su reflejo, tan sólo le muestra su cara de vacío, sus sombreados ojos por la ansiedad que le causa la planicie de sus rutinarios días que la acercan a la muerte.