Te presto a mi mayor tesoro, a mi luz encendida las noches oscuras, a mis vivos colores en un día de lluvia, te presto su sonrisa de malvavisco vainilla, te presto su aroma vivaz a dulce toque de amor púrpura ...
Te presto mis labios, mis ojos que no saben callar, te presto mi consentida voz, te presto a mi manito auxiliar, te presto mi silencio que rie cuando no sabes que mas contar.
Te presto mi sueño, mi alegría, mi felicidad, mi ternura, mi compañia, mi suspiro, mi fortuna, mi deseo, mi cielo, mi vida, mi alma, mi pulsera...
Te presto mi más valioso bien cuida su textura, su brillo y su delicadeza; por favor no empañes su reflejo con tu ansioso interés de saber que guarda, en medio de tan refinada belleza.
