Fact

Y se cree muy importante maquillando su soledad con sus ocupaciones, cree que esta por encima del bien y del mal, que todo esta bien, que las cosas que le suceden y le preocupan al mundo no son su problema, que usted no es la gente, es una galaxia alterna que flota en una burbuja en este universo por equivocación del sino.

Piensa que sus anhelos y deseos no son los típicos de los terrícolas, que encontrar el amor es un absurdo, que casarse y ser felices comiendo perdices es solo un cuento de hadas, que la realidad es una escala de grises. Que para ser feliz no se nesecita de nadie más, solo su independencia, su libertad angustiada. Se excusa diciendo que no ha llegado la persona indicada que sus estándares son lo suficientemente altos como para que un ser terrenal aspire a ser su compañia.

Sin embargo está esperando un milagro, mientras pasa las noches ocupando la mitad de su cama fría, recogiendo migas del pasado que aún la confunde, la aturde y la desvela, removiendo entre la arena la verdad, buscando en el agua claridad, silencio, aire.

Se mira al espejo como si éste tuviera su respuesta, pero tan solo es su reflejo, tan sólo le muestra su cara de vacío, sus sombreados ojos por la ansiedad que le causa la planicie de sus rutinarios días que la acercan a la muerte.

Meeting

Ya llevaba varios días sin dormir, sus voces retumbaban en mi cerebro como un gigantesco gong de bronce, todos discutían al tiempo, me preguntaban, me decían, se quejaban, gritaban, manoteaban, se empujaron y dije: ¡Basta! vamos a resolver esto como adultos que somos, qué les parece si nos vemos en el petit café de la zona rosa, hablamos y resuelven sus diferencias, pero por favor a mí ya no me incluyan, no tengo mente, ni fuerza para esto tengo suficiente con mi quilombo.

Y así fué llegaron tan puntuales como siempre y ahí estabamos los cuatro reunidos en la misma mesa con sus miradas llenas de duda, de miedo, de desazón.
Tomé la vocería y dije bueno ¿Qué es lo que pasa? El primero en responder fue Pasado, lo que pasa es que ella está molesta conmigo pero, yo no tengo la culpa las cosas así fueron y ya, no hay nada que lo pueda hacer cambiar.

Pero claro que estoy molesta porque gracias a usted es que yo existo, yo no pedí existir, yo no queria nacer, mucho menos vivir para saber que mi existencia no ha tenido ningún sentido... Respondió Ficción.

Antes deberías agradecerme si he sido yo quién te trajo a la vida entonces me debes respetar como tu creador. Insistió Pasado.

Prff!!! Por favor no puedo creer que su ego no le permita ver más allá de sus narices no sea cretino, no entiende que no quiero tener nada que ver con usted? No entiende? Apuntó Ficción...

Y pasó un buen rato en medio de discusiones y manoteos, altos volumenes de voces, varios capuccinos y solo dos estabamos en medio de tan soberana discusión aguardando silencio, se vió volar la bolsita del azúcar por encima de nuestras cabezas, las gotas de café adornando la mesita y el mesero con su mirada angustiada preguntándonos si necesitábamos algo más... Ayuda tal vez?

Sin embargo los miembros activos del público de la interminable guerra entre Ficción y Pasado sabíamos que en algún momento veríamos izar de parte de cada uno sus banderitas blancas, así que esperabamos atentas el ansioso momento.
De pronto me entretuve observando una mariposa que se posó en la planta que adornaba el balcón del lugar y en medio de mi observación atenta no escuché un sonido más, ni de reproches, ni de culpables, ni de rencores. Un silencio aturdió mis sentidos y volteé mi mirada para ver como se había solucionado tan enredado conflicto. En ese instante, en esa mesa, en frente de mis ojos, me sorprendió notablemente ver un par de siluetas que se fundían en un solo beso, mientras mis pupílas dilatadas enfocaban tales sombras me percaté que Pasado Y Ficción estaban siendo uno solo representados en ese magnánimo beso apasionado.

Entonces las dos presencias restantes hicimos un gesto de salida de emergencia, dejamos la propina en la mesa y salimos tomadas de la mano, Realidad Y Yo.

Propósito

Hacía un recuento de mis ultimos 365 días, y pensaba, recordaba, devolvia la pelicula, la pausaba en cualquier escena y la analizaba a profundidad. Se acerca el comienzo de un nuevo ciclo, otro año más, realmente el cambio no es mucho es un día común, un día normal...

La gente suele desear en los cumpleaños salud, dinero y amor. ¿Son electivas? ¿Puedo escoger a mi gusto? El dinero es un mal necesario podría hacerme acreedora de enemigos que lo quieran más que yo, no quiero despertar molestias ni envidias.
El amor lo tengo interno por todo lo que me rodea y se hace cada vez mas solído con el paso de los días.
Ok en ese caso me quedo con la salud, acompañada de energía de sobra para recibir cada día con la mejor disposición.

Por lo regular en estos últimos días antes de cumplir otro año más, se fijan metas, se hacen pactos y se proponen retos. Hasta ahora he pensado en dejar la gaseosa del todo, hacer deporte, escribir un libro, comer saludable y ojalá con fibra :S, pintar, viajar... todas esas cosas suenan muy lindas, que tal si dejamos de lado el idealismo y nos vamos a lo realmente importante, para este año que empieza me propongo firmemente a soñar, pero lo más importante recordar eso tan importante que he olvidado, Creer. Creer que los sueños alimentan el espíritu, Creer que todo puede ser posible, Creer que la magia aún existe. Creer en Mí.